Alianza Lima intentará este domingo en el estadio Garcilaso del Cusco romper el maleficio de no poder sumar de a tres en esa plaza ante Cienciano y de paso meterse nuevamente en la lucha por alcanzar la punta del Descentralizado.
Cada año se encuentran, al menos, dos veces, pero hace 16 temporadas que Alianza no sabe lo que es ganar en el Cusco. Se presenta una nueva oportunidad y los íntimos van a la caza de un Cienciano que no atraviesa por su mejor momento.
Alianza festejó en el 2001 en tierras cusqueñas, cuando se hizo con el título nacional, pero en aquella ocasión la copa se definió en tandas de penales y en el tiempo regular igualaron 1-1.
Los blanquiazules están de capa caída. Dos derrotas consecutivas (Universitario y San Martín) han calado en el sentimiento íntimo. Los jugadores no comprenden por qué se le complican partidos accesibles y el técnico Gustavo Costas no ocultó su malestar por dos falencias alarmantes en su equipo.
Primero, la zona defensiva. En el clásico, los íntimos derrotaban a Universitario, pero dos pelotas paradas ejecutadas por Solano, los dejaron con las manos vacías. Similar situación sucedió frente a San Martín.
Otra es la falta de definición. Costas fue claro: “tengo jugadores luchadores arriba, pero que no saben meterla”.
Peor aún, el jugador más desequilibrante de Alianza, Johnnier Montaño no viajó al Cusco porque sigue lesionado de su cadera. Marko Ciurlizza tampoco viajo por lesión, al igual que Claudio Velásquez. Wilmer Aguirre no fue tomado en cuenta por el técnico.
En tanto, el profesor imperial, Marcelo Trobbiani, utilizaría en la segunda etapa a Julio García, quien viene de jugar en el fútbol chipriota. Quien sí quedó descartado es Walter Vílchez, pues está en proceso de aclimatación. Asimismo, Jhoel Herrera y Roberto Duffó deben cumplir una fecha de suspensión.
En la primera rueda del Descentralizado, Alianza Lima derrotó por 2-0 a Cienciano en el estadio de Matute.
Cada año se encuentran, al menos, dos veces, pero hace 16 temporadas que Alianza no sabe lo que es ganar en el Cusco. Se presenta una nueva oportunidad y los íntimos van a la caza de un Cienciano que no atraviesa por su mejor momento.
Alianza festejó en el 2001 en tierras cusqueñas, cuando se hizo con el título nacional, pero en aquella ocasión la copa se definió en tandas de penales y en el tiempo regular igualaron 1-1.
Los blanquiazules están de capa caída. Dos derrotas consecutivas (Universitario y San Martín) han calado en el sentimiento íntimo. Los jugadores no comprenden por qué se le complican partidos accesibles y el técnico Gustavo Costas no ocultó su malestar por dos falencias alarmantes en su equipo.
Primero, la zona defensiva. En el clásico, los íntimos derrotaban a Universitario, pero dos pelotas paradas ejecutadas por Solano, los dejaron con las manos vacías. Similar situación sucedió frente a San Martín.
Otra es la falta de definición. Costas fue claro: “tengo jugadores luchadores arriba, pero que no saben meterla”.
Peor aún, el jugador más desequilibrante de Alianza, Johnnier Montaño no viajó al Cusco porque sigue lesionado de su cadera. Marko Ciurlizza tampoco viajo por lesión, al igual que Claudio Velásquez. Wilmer Aguirre no fue tomado en cuenta por el técnico.
En tanto, el profesor imperial, Marcelo Trobbiani, utilizaría en la segunda etapa a Julio García, quien viene de jugar en el fútbol chipriota. Quien sí quedó descartado es Walter Vílchez, pues está en proceso de aclimatación. Asimismo, Jhoel Herrera y Roberto Duffó deben cumplir una fecha de suspensión.
En la primera rueda del Descentralizado, Alianza Lima derrotó por 2-0 a Cienciano en el estadio de Matute.
0 comentarios:
Publicar un comentario